Se está desarrollando otra actividad en el Proyecto Quilombo do Carmo, el taller de graffiti dirigido por la graffitera profesional Aline Machado. Los participantes tienen entre 7 y 12 años, y todos están muy interesados en aprender más sobre este tipo de arte que da vida y color a nuestras ciudades.
El graffiti es una forma de manifestación artística que comenzó a aparecer en los años 70, cuando los jóvenes de Nueva York empezaron a dejar sus marcas en los muros de la ciudad. Estas marcas evolucionaron con técnicas y dibujos. Este arte es muy utilizado como crítica social y también como forma de intervención directa en la ciudad, democratizando así los espacios públicos.
La idea es involucrar a los participantes del taller en el proceso de elaboración y realización de una obra de arte urbano que forme parte del entorno en el que ellos mismos viven, dejando así su huella y expresión.
"Lo más bonito de esto es trabajar juntos, desde estudiar las bases del graffiti, su historia, hasta elaborar un diseño y salir a realizar el proyecto en el muro. Veo que están todos contentos, porque no faltan a clase y se desenvuelven muy bien en este proceso", dice Aline.
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